lunes, 21 de mayo de 2012

Nuestra lactancia

La infinidad de posts, artículos y comentarios que he leído últimamente en respuesta a la última portada de la revista estadounidense "Time" en la que sale una madre amamantando a su hijo de 3 años, me han animado a contar la historia de nuestra lactancia. Quizás también sea algo que necesito hacer para curar unas cuantas heridas, y si no, aunque sea para desahogarme. 


Sé que no soy menos madre por haber amamantado a mi hijo sólo cuatro meses. Creo que todas las madres intentamos hacerlo lo mejor posible. Mateo se ha desarrollado perfectamente y, como dice su tía, es un niño sano, inteligente y, por encima de todo, feliz. Pero a pesar de todo, aún no logro deshacerme de esa especie de culpa que siento por haber "fracasado" con la lactancia materna, por no haber sido capaz de alimentar a Mateo exclusivamente con mi leche, por no haber podido ofrecerle ese regalo tan maravilloso durante más tiempo. Hasta el día de hoy cuando veo a una madre dándole el pecho a su hijo los fantasmas de nuestra lactancia me invaden y me preguntó qué pasó con nosotros. 

Cuando estaba embarazada no tenía dudas, yo quería dar el pecho a mi hijo. ¿Hasta cuándo? No lo sabía, hasta que los dos quisiéramos y pudiéramos. Nunca imaginé lo difícil que podía ser la lactancia. Me concentré en prepararme para el parto, y pensaba que una vez superado ese momento lo demás fluiría naturalmente. A pesar de que Mateo llegó tres semanas antes de los esperado el parto fue rápido y sin complicaciones, y aunque quizás no fue tal como lo esperaba, el recuerdo que tengo es maravilloso. 

Los problemas empezaron dos días después cuando, ya en casa, tuve la subida de la leche. Tenía los pechos tan hinchados que Mateo no conseguía sacar ni una gota de leche. En ese momento intentaba recordar lo que nos habían dicho sobre el tema en las clases de preparación para el parto, y lo único que venía a mi mente es que no debía usar el sacaleches, porque entonces iba producir más leche y la situación empeoraría. Al ver que Mateo lloraba continuamente y que no ensuciaba los pañales nos fuimos a urgencias. Como no comía, estaba comenzando a deshidratarse y al verme lo primero que me dijeron las enfermeras fue: "pobre, te va a dar una mastitis...". En ese momento sólo quería llorar. A Mateo le dieron un biberón y a mí me pusieron el sacaleches, me dieron un par de consejos y el teléfono de un grupo de apoyo a la lactancia. 

Al día siguiente llamé al grupo de apoyo a la lactancia, me dieron algunos consejos para descongestionar los pechos y, afortunadamente, con esto la situación empezó a mejorar. Las dos semanas siguientes me las pasé con Mateo enganchado, día y noche, recuerdo que no tenía tiempo para comer ni para ducharme y casi no dormía. Cuando lo soltaba no hacía más que llorar. Llegó el día de la visita con el pediatra y nos dimos con la sorpresa de que Mateo prácticamente no había ganado peso, así que nos dijo que debíamos complementarle con leche artificial. A mí se me vino el mundo encima, pero estaba tan cansada y confundida, que lo acepté. Así fue como empezó nuestra lactancia mixta y así también fue como cuatro meses después nuestra lactancia materna llegó a su fin. 

La lactancia mixta es complicada, pero yo no quería dejar de dar el pecho. Tomaba infusiones, cerveza sin alcohol, avena y todo lo que me dijeran que ayudaba a aumentar la producción de leche; y a la vez lavaba, esterilizaba y preparaba biberones. Cuando me quedaba tiempo y fuerzas me sacaba leche. Pero tengo que confesar que esos primeros biberones me ayudaron mucho. Mateo empezó a estar más tranquilo, lloraba menos, dormía mejor y su padre y sus abuelos tenían más oportunidades para disfrutar de él. Además, me permitieron descansar cuando estaba verdaderamente agotada.

Hoy, a la distancia, pienso que debí haber hecho las cosas de otra manera. No debí rendirme tan rápido, debí buscar más información, más ayuda, debí haber insistido más, esforzado más para conseguir la lactancia materna exclusiva con la que tanto había soñado. Si tengo más hijos volveré a intentarlo, y con la información y experiencia con la que cuento ahora espero conseguirlo. 

8 comentarios:

  1. Hola Mila!
    acà estamos viviendo lo opuesto!
    Rafaella no me suelta la teta y yo con ganas de q ocurra el destete lo antes posible, pero por lo visto, la nena no va a soltar la teta tan pronto. y no tengo miedo de q me apedreen por eso. La verdad no duermo bien, despierto cada tres hs o menos para amamantar y mi hija ya va a cumplir 10 meses,pasado mañana!

    Es complicado... Rafaella toma su mamadera, desde el tercer dia de vida, pero nunca quizo soltar la teta. Puede tomar las mamaderas q sea, q quiere teta para dormir, me veo agotada!

    Nadie es mas o menos madre por lo q sea, como vos decis y tenes mucha razon: uno da lo mejor de si, uno hace lo mejor q puede.

    Otra cosa: q bueno q hayas disfrutado de tu familia! Y Mateo mas aun, obviamente, q hermosos momentos.

    Me encanta tu blog! besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Luiza!
      Gracias por tu comentario :) Mateo no toma teta pero igual se despierta mucho por la noche!!! Ya estoy preparando un post sobre el tema porque hay días en que si no es por el café no podría mantenerme en pie..jeje. Intenta disfrutar de esos momentos con Rafaella que seguro después los vas a extrañar!
      Besos

      Eliminar
  2. La verdad no tengo aún hijos, y si algún día los tengo voy a tener que estar preparadaza debido a un medicamento que tengo que usar a diario (y causa defectos fetales) No sólo tengo que planificar con sumo cuidado un embarazo (y sopesar riesgos), sino que investigué por Internet y el medicamento que tomo (y no puedo dejar de tomar) pasa a través de la lactancia. Me daría mucha pena la verdad no poder hacerlo, así que veré en el futuro otras opiniones al respecto.

    Liiindo el blog.

    ResponderEliminar
  3. Hola Franchis,

    Qué bueno que te haya gustado el blog y gracias por tu comentario! En lo que respecta a la lactancia mi consejo es que, llegado el momento, te asesores bien, hay muchos grupos de apoyo a la lactancia y tienen asesoras muy bien formadas e informadas. Ellas seguro que te pueden ayudar con el tema del medicamento que necesitas tomar. En mi opinión la lactancia es un tema que puede ser complicado y por eso creo que es importante que las mamás que quieren dar el pecho busquen información y ayuda durante el embarazo. También hay muchos mitos y mala información en torno a la lactancia, por eso lo mejor es buscar un grupo de apoyo, como La Liga de la Leche por ejemplo.

    Bueno, aquí estamos si podemos ayudarte en algo, mucha suerte y un abrazo!

    ResponderEliminar
  4. Hola Mila,

    Justo ahora estoy investigando el tema de la lactancia materna, afortunadamente no tuve inconvenientes para amamantar a mis dos hijos. En la clínica donde nacieron, existe un grupo de apoyo que orienta súper bien con este tema. El detalle es que según el pediatra de mi bebé de 3 meses, bajo de peso y revisando los exámenes de orina, al parecer es mi leche que no lo nutre lo suficiente. Ahora debo alternar leche de formula con la materna. Mi temor es que deje de producir, pero si es necesario darle el pecho luego del tete lo haré o si debo extraerla para estimular la producción también lo haré.

    Gracias por compartir tu experiencia. Y no eres menos madre por lo que sucedió, no tenemos un manual.

    Saludos,
    Rocío

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Rocío,

      Muchas gracias por visitar el blog y por tu comentario! No soy ninguna experta en el tema, pero si realmente quieres darle el pecho a tu bebé de forma exclusiva, te recomendaría que te pongas en contacto con algún grupo de apoyo a la lactancia, tipo La Liga de la Leche. Tienen muy buenas asesoras y seguro te pueden ayudar. Estoy segura que tu leche es justo lo que necesita!

      Si puedo ayudarte en algo no dudes en contactarme.

      Un abrazo y mucha suerte!

      Mila

      Eliminar
  5. Hola Mila!! Lo primero que tienes que sacar esos fantasmas de tu cabeza ya... le diste 4 meses y eso ya le benefició mucho. En la actualidad te hacen sentir así no das lactancia materna exclusiva y ya no lo está haciendo bien. Y luego hay el problema de lo poco que saben los pediatras de lactancia y lo rápido que dan un bote de leche artificial para acabar con la lactancia sin primero intentar saber cual es el problema. Yo tampoco tuve un camino de rosas, puedes leer mi experiencia en mi blog, pero logré sacar la lactancia adelante gracias a Dios, y te aconsejo que para el próximo leas el libro de Carlos Gonzalez llamado Un regalo para toda la vida. No sabes lo que me ha ayudado, y también asistir personalmente a un grupo de lactancia tengas problemas o no, va genial. Besos!

    ResponderEliminar
  6. Hola Mila! te cuento que yo pase por lo mismo que vos! Entre amamantar, el biberon, el cansancio y el stress hicieron que amamantar fuera una tortura para mi y lo deje a los 3 meses. Jure nunca mas volver a hacerlo. Hice lo mejor que pude y si, me arrepiento de haberme rendido tan facilmente, pero uno hace lo que puede y no tiene que ser tan dura consigo misma, despues de todo queremos lo mejor para nuestros hijos no?
    Ahora, a dias de tener mi segundo hijo, voy a volver a intentarlo, se que no va a ser facil pero voy a tener mas paciencia, mas conocimiento, y por sobre todo voy a ser menos dura conmigo misma!
    No sientas culpa, acordate que lo mas importante es el amor que le tenes a tu hijo, y esto no es una competencia para ver quien es la mejor madre!, todas pasamos por cosas distintas y cada una hace lo mejor que puede!

    ResponderEliminar

¡Gracias por tu visita! Espero volver a verte pronto por aquí :)

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...